ASTURIAS QUIERO PINTARTE.
A pesar de estar tan lejos de ti, quiero hacerte un cuadro con mis manos, pinturas y pinceles, lleno de verdor, de ese verdor que llevo en mi vieja mente de tus robles, pinos, castaños, de tus praderas, hortalizas, el verde esmeralda, ese verde que no se pierde en todo el acho y largo navío que su popa linda con Galicia y su proa con Santander, su derecha con León y su izquierda con el Cantábrico, que se aprecia la vista.
Esa tierrina tan fértil donde nacen esos hombres y mujeres que salen al campo para poner las semillas en tu suelo, para que sus frutos llenen de vida y de vigor a todo tu entorno y más allá del puerto Pajares, quiero pintar ese campo para que no se pierda ese verde.
Quiero pintar a eso hombres y mujeres que cuidan tus campos, llenos de manzanos, de perales, de piescos, esas fresas que tiñen el rojo contraste de tu campiña verde. Luego te pinto los llagares en donde con tus manzanas hacen la sidrina que al beberla tan refrescante y llena de gosgorinos, dan alegría a los asturianos.
También quiero pintarte un poquitín de negro, de esos hombres que bajan las minas de Llangreu y Mieres, que sacan de tus entrañas la riqueza del negro carbón que llevas dentro, esa mancha de negro que tiñe tu verde es el luto que llevas por tus hijos asturianos que se quedaron dentro de ti y los que se fueron a otras partes de la Tierra y no volvieron.
Voy a pintarte ese vestido con volantes tan sinuosos que en tus montes y cordilleras suben y bajan llenos de blancas nieves en el invierno, descansan en las orillas de ese mar Cantábrico suave y bravío, algunas veces y donde en sus cristalinas aguas reciben las limpias de tus ríos llenos de truchas y salmones, bañan tu costa día y noche, llenas de playas de arena suave y adornarte con olas muy caprichosas y festones de espuma blanca y juguetona y entre tus rocas salen los centollos, andaricas, mejillones, percebes, amasueles y algunas cosas más.
Voy a pintarte esas coronas de nubes que se mueven entre tus montañas, que al salir el sol alumbra ese verde tan intenso de varias tonalidades, desde los brotes más tiernos de tus brezas y la hierba de los pastos, hasta el oscuro de tus pinos, robles y castaños por doquier, pasando por esos ocres de tonos tan diferentes del verde que no se pierde.
Asturias Patria Querida se oye una gaita tocar, Asturias de mis amores, no te gane la emoción y te pongas a llorar por tus hijos que se fueron y se van a otro mundo a trabajar, aunque nunca ellos olvidaran tu verde esmeralda en sus retinas grabadas, bueno será si volvieran a despertar de un sueño.
Pero si no…yo te aseguro que nunca te olvidaran y con este cuadro pintado por este viejo astur – langreano, quedará grabado en el lienzo de tu retrato sin igual.
Con todo el amor a mi tierra natal, Asturias y Langreo, el abuelo Monxu.